Tarta de queso con chocolate blanco y terciopelo rojo
Tarta de queso con chocolate blanco y terciopelo rojo
Ingredientes
Para las capas de pastel Red Velvet:
1 huevo grande
1 cucharada de colorante rojo
1/2 cucharadita de extracto de vainilla
1/2 cucharadita de vinagre blanco
1 1/4 tazas de harina para todo uso
1 taza de azúcar granulada
1/4 taza de cacao en polvo sin azúcar
1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
1/2 taza de aceite vegetal
1/2 taza de suero de leche
Para la capa de cheesecake de chocolate blanco:
1 taza de chocolate blanco, derretido y ligeramente enfriado
1/4 taza de crema espesa
1 cucharadita de extracto de vainilla
16 oz de queso crema, ablandado
1 taza de azúcar granulada
2 huevos grandes
Para la cobertura de gelée Red Velvet:
1/4 taza de azúcar
1 cucharada de gelatina en polvo
1 taza de jugo de arándano o frambuesa (para darle color y sabor)
Para decorar (opcional):
Crema batida
Trozos de chocolate amargo
Migas de terciopelo rojo
chispas de chocolate
Instrucciones
Prepare las capas de pastel Red Velvet:
Precalienta el horno a 350°F (175°C). Engrase y forre dos moldes para pasteles redondos de 8 pulgadas.
En un bol, tamiza la harina, el azúcar, el cacao en polvo, el bicarbonato de sodio y la sal.
En otro tazón, mezcle el aceite, el suero de leche, el huevo, el colorante rojo, la vainilla y el vinagre.
Agregue gradualmente los ingredientes secos a los ingredientes húmedos, mezclando hasta que estén combinados.
Divida la masa uniformemente entre los moldes y hornee durante 20-25 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, éste salga limpio. Deja que los pasteles se enfríen por completo.
Prepara la capa de cheesecake de chocolate blanco:
Precalienta el horno a 325°F (165°C).
En un bol, bata el queso crema y el azúcar hasta que quede suave.
Agrega los huevos uno a la vez, mezclando bien después de cada adición.
Incorpora el chocolate blanco derretido, la crema espesa y la vainilla.
Vierta la masa en un molde desmontable de 8 pulgadas forrado con papel pergamino. Coloque el molde en una fuente para hornear más grande y agregue agua caliente hasta la mitad de los lados del molde desmontable.
Hornee durante 45-50 minutos o hasta que el centro esté ligeramente cuajado. Déjalo enfriar y luego enfríalo en el refrigerador durante 4 horas o hasta que esté firme.
Prepare la cobertura de gelée Red Velvet:
En una cacerola pequeña calentar el jugo de arándano o frambuesa con el azúcar hasta que el azúcar se disuelva.
Espolvorea gelatina sobre 2 cucharadas de agua, déjala reposar durante 5 minutos y luego revuélvela con la mezcla de jugo caliente hasta que se disuelva.
Deje que la gelée se enfríe un poco antes de verterla sobre la capa de tarta de queso en el molde. Refrigera hasta que la gelée esté cuajada.
Armar el pastel:
Coloque una capa de pastel de terciopelo rojo en un plato para servir. Extienda una fina capa de glaseado si desea que se adhiera.
Cubra con la capa de tarta de queso, seguida de la segunda capa de terciopelo rojo.
Vierta la cobertura de gelée si aún no está lista, dejando que cubra ligeramente los lados.
Adorne con crema batida, trozos de chocolate amargo, migas de terciopelo rojo y chispas de chocolate al gusto.
¡Disfruta de este espectacular, rico y cremoso pastel de queso con chocolate blanco Red Velvet!